ARREPENTIRSE

• Padre Dios, lo siento por todas las veces y todas las formas en que te he rechazado. Por favor perdoname. Me arrepiento por no creerte, por no escucharte y por rechazar tu amor. Me arrepiento por no confiar en Ti y por dudar de Tu amor por mí. Me arrepiento por toda la terquedad, el orgullo, la obstinación y la rebelión en la que he caminado.

RENUNCIAR

• En el nombre de Jesús, renuncio a todo rechazo a Dios. Renuncio a todo envolvimiento con cualquier espíritu que me lleve a rechazar a Dios. Renuncio y rompo todos los votos y pactos, todos los lazos del alma y los lazos generacionales que me atan al rechazo de Dios. Elijo amar a Dios con todo mi corazón, con toda mi alma y con toda mi mente. Renuncio a todo espíritu que tenga que ver con el rechazo de Dios.

ROMPER

• Y ahora, como una elección de mi voluntad, derribo este muro ahora, en el poderoso nombre de Jesús.

ARREPENTIRSE

• Padre Celestial, me arrepiento por rechazarme a mí mismo. Me arrepiento de todas las cosas negativas que he pensado y dicho sobre mí mismo. Me arrepiento de no aceptarme y de tratar de ser alguien que nunca debí ser. Me arrepiento por no creer que valgo y valoro tal como soy. Me alejo de rechazarme a mí mismo.

RENUNCIAR

• Y renuncio a todas las mentiras que he creído sobre mí. Renuncio y rompo cada maldición que he pensado o dicho acerca de mí mismo. Elijo aceptarme. Rompo todo lazo con el autorrechazo y todo espíritu que me lleve a rechazarme a mí mismo.

ROMPER

• Me levanto ahora contra este muro de autorrechazo y lo derribo en el nombre de Jesús.

ARREPENTIRSE

• Santo Dios, me arrepiento por ceder ante el miedo al rechazo. Me arrepiento de toda mentira y engaño, sospecha y desconfianza, y control o manipulación a los que yo o mi familia hemos dado lugar. Me arrepiento de tratar de complacer a la gente en vez de a Ti, Señor, y me arrepiento de mi conducta autoprotectora y de toda autocompasión.

RENUNCIAR

• Y ahora, renuncio al miedo al rechazo y a todo el comportamiento destructivo al que me ha llevado. Renuncio y rompo todos los lazos del alma y los lazos generacionales al miedo al rechazo, y rompo su dominio en mi vida.

ROMPER

• Me niego a estar atado a este miedo por más tiempo, y derribo este muro del miedo al rechazo; lo derribo ahora, en el poderoso nombre de Jesús.

ARREPENTIRSE

• Padre Celestial, me arrepiento de rechazar a otros. Te pido que me perdones por todo el daño y el dolor que les he causado. Me arrepiento de mi falta de perdón y resentimiento hacia aquellos que me han lastimado. Me arrepiento de juzgarlos, culparlos y criticarlos y de querer herirlos o derribarlos.

RENUNCIAR

• Espíritu de rechazo de los demás, renuncio a ti. Renuncio a todas las formas en que les he permitido influenciarme para rechazar a otros. Renuncio a toda ira, falta de perdón, resentimiento y amargura hacia los demás. Renuncio a todos los lazos del alma y lazos generacionales al rechazo de los demás. Elijo ser una persona que perdona, y libero el perdón hacia todos los que me han lastimado o hecho daño.

ROMPER

• Espíritu de rechazo, me levanto contra ti y derribo este muro del rechazo de los demás, lo derribo ahora en el nombre de Jesús.

Espíritu de rechazo, la sangre de Jesús te rodea y te envuelve. No tienes derecho; no tienes autoridad para quedarte conmigo. Vuelvo tu espada contra ti. ¡Rechazo, te rechazo! Estás en una montaña resbaladiza y no tienes nada a lo que aferrarte.

Rompo todos los acuerdos contigo. Rechazo tus mentiras. El terreno que has tomado, ahora lo recupero. Reafirmo mi confianza en Dios y en Su Palabra, y renuncio a toda obra de oscuridad asociada contigo. Reafirmo que soy Su hijo y Él es mi Padre. Rompo todos los lazos contigo. Te cierro la puerta. Estás expuesto. En el nombre de Jesús, te echo fuera de mi vida. ¡Vete! ¡Sueltame! ¡Ahora déjame en el nombre de Jesús!