Ora estas oraciones por ti mismo, por hermanos y hermanas específicos en el Señor y por Su Iglesia. Medita, ora y amplía estas oraciones apostólicas, para el fortalecimiento y el crecimiento de los creyentes.

Las oraciones apostólicas en la Escritura nos brindan una manera poderosa y divinamente establecida de orar. Estas oraciones son: 

"Cuando oro… quiero hablar de algo más que de mí y mi necesidad; quiero hablar con Dios sobre Dios. Quiero hablar de lo que dicen las Escrituras acerca de lo que Él quiere hacer y realmente va a hacer. Quiero pedirle, a partir de Su Palabra, que exprese las cosas que están en Su corazón aquí, en mi mundo, entre mis amigos. Las oraciones del Nuevo Testamento del apóstol Pablo y otros pueden refrenarnos de hablar con Dios principalmente sobre las deficiencias de Su iglesia o nuestras propias deficiencias, y en su lugar, llevarnos a hablar con Dios principalmente sobre Dios. A medida que reorientamos nuestros corazones y vidas en torno a la belleza de Dios, el amor de Dios y la definición de éxito de Dios, nuestra vida de oración seguirá el mismo camino. Nuestra vida de oración puede pasar de ser egocéntrica y enfocada en tareas a estar centrada en Dios y en las Escrituras: oraciones que hacemos con afecto y confianza en que Él nos disfruta y que nuestro pequeño y débil intento de conocerlo le agrada." - David Sliker


"Al pasar las últimas décadas trabajando en un ministerio de oración, descubrí la belleza de las oraciones centradas en Dios y fundamentadas en las Escrituras, oraciones que piden ayuda desde un lugar de creciente confianza en quién es Dios y lo que Él quiere impartir. El beneficio de las oraciones centradas en Dios y fundamentadas en las Escrituras radica en su poder para mover nuestros propios corazones, no el corazón de Dios. Esa es la lógica divina detrás de por qué las oraciones del Nuevo Testamento están redactadas de la manera en que lo están. Están diseñadas para acelerar el movimiento de nuestros corazones y cautivarnos con la belleza de quién es Dios, cómo es Él y lo que quiere impartir a Su pueblo. Orar las oraciones de las Escrituras es uno de los regalos que Dios nos ha dado para ayudarnos. Sus oraciones, Su Palabra y Sus mandamientos son todos para nuestro beneficio y ayuda." - David Sliker